Nuestra experiencia personal tanto laboral como la propia de la vida, nos ha convertido en seres capaces para ciertas cosas y menos habilidosos para otras, lo que a mi parecer puede cambiar.
En cuanto a las competencias que desarrollamos, el artículo distingue principalmente entre dos tipos:
- - Competencias ordinarias
- - Competencias extraordinarias
Estas competencias van a ser necesarias para nuestro trabajo y se podrían resumir en competencias personales. Según la educación de cada uno y la forma de vida que haya llevado desarrollará competencias personales diferentes y por lo tanto estará preparado para un puesto o para otro.
En la vida laboral se ha hecho indispensable contar con unas competencias extraordinarias adecuadas para abordar problemas o situaciones inesperadas en el trabajo.
Es difícil medir este tipo de competencias, ya que hasta que uno no se encuentra en la situación extraordinaria no sabe si podrá afrontarla o no.
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